
Tres hombres y una mujer oriundos de Corrientes aceptaron penas de entre tres y seis años y medio de prisión por transportar 230 kilos de marihuana en un utilitario interceptado seis meses atrás en un control vehicular en la autopista Rosario-Santa Fe, trámite en el cual los sospechosos dijeron que llevaban una carga de fideos.
Las condenas fueron resueltas mediante procedimientos abreviados —acuerdos plenos, tal como se denominan en el ámbito de la Justicia federal— que incluyen el pago de multas por más de 33 millones de pesos.
Los acuerdos fueron homologados por el juez federal de Garantías Carlos Vera Barros en una audiencia realizada el pasado 21 de abril, con la participación de los fiscales federales Jorge Gustavo Onel y Gastón Theler, del Área de Investigación y Litigios de Casos Complejos de la Unidad Fiscal Santa Fe.
Fideos no
La investigación se inició con el hallazgo de la droga en un control vehicular de rutina realizado el 26 de noviembre de 2024 a las 16.40 sobre la autopista Brigadier López en la estación de peaje de Sauce Viejo, cerca de la capital santafesina.
Allí fue interceptado un utilitario Renault Kangoo gris en el que viajaban Miguel Emmanuel Frete Orue al volante junto con su pareja, Sonia Beatriz Mierez, y Daniela Soledad Sena, todos oriundos de la provincia de Corrientes. Si bien no se precisó de dónde habían partido, los investigadores presumen que habían salido de la localidad formoseña de El Colorado.
Cuando el personal de la Policía de Seguridad Vial de Santa Fe solicitó al conductor la documentación personal y del rodado, el chofer respondió que solo tenía el DNI. Entonces le consultaron por el destino y la carga que llevaba, a lo que contestó que iba a Rosario con “cajas y bultos con fideos”.
Al notar cierto nerviosismo por parte de Frete Orue, los agentes le pidieron que bajara del vehículo. En ese marco el conductor se negó a acatar la orden y directamente dijo que si bajaba del utilitario terminaría preso, por ende pidió que no revisaran la carga porque llevaba droga. En ese marco los policías comunicaron la situación a la fiscalía federal de Santa Fe, desde donde ordenaron la requisa del vehículo y de sus ocupantes.
La medida convocó a gendarmes del Escuadrón Santa Fe Norte 1 que comenzaron a descargar envoltorios y cajas con asistencia de un perro entrenado en la detección de estupefacientes. Fue así que terminaron confirmando el hallazgo de 229,910 kilos de marihuana dispuestos en 15 bultos azules y cinco cajas de cartón. Para la fiscalía federal santafesina la carga tenía un valor de mercado estimado en torno al millón de dólares.
El avance de la investigación
El hallazgo originó una investigación que terminó detectando a otros implicados en el transporte de la droga. Rodrigo Manuel Lovera y Carlos Adrián Sánchez iban en un Toyota Corolla que hacía las veces de “coche puntero” circulando por delante de la Kangoo. En cuanto al destino de la droga no quedó del todo claro, pero se aventuró que podría haber sido la Ciudad de Buenos Aires. También se identificó a Víctor Hugo Mocca como titular del Toyota.
La investigación de los fiscales apeló a información extraída de conversaciones encontradas en los celulares de Sena y Mierez, así como de las cámaras de vigilancia del peaje de Sauce Viejo y del Hotel Nuevo Real de la capital de Formosa. Así fue tomando forma la causa por el delito de transporte de estupefacientes agravado por haber sido cometido en forma organizada con la intervención de más de tres personas.
Como coautores de ese delito Frete Orue y Sánchez deberán cumplir una pena de 6 años de prisión. Como ambos registraban condenas anteriores las penas se unificaron en siete años y medio para el primero y seis años y diez meses para el segundo. Por su parte Lovera fue condenado a seis años y medio, también como coautor. Sena aceptó una pena de tres años de prisión condicional como partícipe secundaria.
El acuerdo estipuló la imposición de sendas multas de 10.400.000 pesos para Frete Orue y para Sánchez, otra de 9.360.000 pesos para Lovera y una de 3.640.000 pesos para Sena.
Por su parte, los imputados Mierez y Mocca no celebraron acuerdos hasta el momento por lo que seguirán ligados al proceso y eventualmente afrontarán un juicio oral.
La Capital