
Enrique Romano es un joven no vidente de nuestra ciudad y tuvo que sufrir una insólita situación de quienes no tienen un solo código de humanidad. Puso a la venta su auto y a través de un ardid y engaños lo despojaron de su vehículo.
«Vinieron a comprarme el VW Bora, nos embarullaron a los dos (él y su esposa) y se llevaron el auto» contó escuetamente el joven que vive en Barrio Santa María.
Lo cierto es que el vehículo, patente EUJ 022 de color gris, estaba a la venta y una mujer de Santa Fe se había interesado en él. Llegaron a nuestra ciudad con otro sujeto en una motocicleta.
«Le mandamos fotos para que puedan ver como estaba el auto, les pasamos la ubicación, vinieron pero sin avisar. Se lo mostramos y quisieron probarlo a ver cómo marchaba. Cuando se subieron, hicieron un tramo y el hombre de la moto nos pidió agua, me distraje, entro y cuando salgo se habían ido, con papeles y todo” contó la víctima.