De alcanzapelotas a campeón del fútbol argentino

Parte de los pibes que surgieron del club y gritaron campeón con Colón en la histórica noche del 4 de junio. Todos ellos la pelearon desde muy abajo y le bajaron una estrella al club para su escudo.

La pelota la envía Gandín al área, a jugarse la última heroica para que Colón no se vaya al descenso un 18 de Mayo de 2014, el balón rebota en el arquero de Olimpo, Nereo Champagne, luego da Alario y se pierde en el fondo de la red. Es delirio para los sabaleros. El equipo tiene una vida más en uno de los peores momentos de su historia.

El goleador sale gritando desaforado hacia la platea oeste del estadio y allí lo abrazan todos. Entre ellos un pibe alcanzapelotas que es corondino. Nacido un 2 de junio de 2000 tiempo después tendría la chance de debutar en Primera de la mano de Eduardo Domínguez y ser parte ya en el segundo ciclo del entrenador de bajar una estrella para el escudo del club.

La historia de Tomi Moschión probablemente no sea la tradicional de un jugador de fútbol. Tiene otros condimentos. Para triunfar desde el interior de la Provincia en el fútbol profesional tenés dos opciones: o el club te banca la pensión o tus viejos, los viajes. Esta última es la característica del mediocampista con excelente manejo de pelota sabalero.

Probablemente, sin ese apoyo de una familia que económicamente «puede» la carrera hacia Primera hubiera sido aún «más cuesta arriba». El resto es todo del jugador. Las condiciones, la capacidad mental para aguantar los contratiempos, ser tenido en cuenta y borrado de los nombres que eran convocados, el debut, pasar de entrenar en el predio a ser «el 5» ante River en el Monumental. Una película que tuvo su coronación en la noche de este viernes 4 de junio.

Un corondino se convirtió en campeón del fútbol argentino. Es único, ojalá repetible. Las fotos dieron vueltas por todo el país. El rostro de alegría del pibe de la ciudad es tapa del Diario El Litoral, Olé y El Gráfico (aunque este ya no sale en papel). De El Gráfico, entendés!!! El sueño de todo pibe que jugó al fútbol un tiempo más atrás.

Pero aparte de las realidad de los pósters que quedarán inmortalizados. Moschión es parte de un proyecto de un entrenador que decidió mirar para abajo. Colón ayer tuvo a Garcés de titular pero también contó con el ingreso de Pierotti y Leguizamón. Can más o menos minutos, en el banco, aparte del corondino, también esperaron Tomás Sandoval, Eric Meza, Guillermo González y Danilo Gómez.

Un proyecto y un mensaje. Se puede llegar a Primera y ser campeón como lo hizo Tomás? Se puede. Porque lo único irrenunciable es el esfuerzo. Se debe mirar más para abajo? Se debe. Es una cuestión de principios. Allí yacen las historias de los pibes que dejarán todo por el club.