
Se cumple hoy un año de la consagración del combinado nacional de fútbol en Qatar lo que le permitió a nuestro país sumar el tercer título mundial de la historia. Aquel día, un domingo, pasado el mediodía, nuestra ciudad estalló de algarabía popular.
Por tercera vez consecutiva en medio aquella competición, los corondinos salieron a las calles a disfrutar del triunfo de la selección argentina de fútbol: esa vez fue para gritar campeón del mundo.
Como ya había sido costumbre ante Países Bajos y Croacia en Cuartos y Semifinal la masa se aglutinó en la intersección de San Martín y Sarmiento. Pero ante tamaña cantidad de público comenzaron a marchar hacia Costanera, donde finalizó la concentración.



Como en aquella jornada histórica de julio de 1986, padres, madres y niños eligieron la fiesta popular para expresar toda su gratitud a un equipo que los identificó desde la Copa América hasta ese momento.
Hubo banderas, camisetas, autos y motos adornadas con los colores celeste y blanco, cuadros, figuras de los jugadores y hasta pedidos de asueto para el presidente de la Nación.
En cada hogar se sintió el nerviosismo, en diferentes momentos del partido hubo alegrías y llantos, pero al final todo valió la pena. Argentina gritó campeón y Coronda estuvo a la altura de los festejos.